Por las calles de la localidad de Kennedy en Bogotá, se ven transitar a menudo feroces animales salvajes sobre ruedas y a cuestas de hombres y mujeres dedicados a la labor del reciclaje.
Por las calles de la localidad de Kennedy en Bogotá, se ven transitar a menudo feroces animales salvajes sobre ruedas y a cuestas de hombres y mujeres dedicados a la labor del reciclaje.
Una feroz pantera, un raudo caballo, un esquivo colibrí, un águila mirando fijamente a su presa o una voraz serpiente en pose de ataque. Todas estas imágenes decoran con un realismo impresionante la mayoría de las carrozas de tracción humana que reposan durante las mañanas en las puertas de la bodega de aprovechamiento Remarek, Asociación Recuperando Materiales Reciclables de kennedy, pionera de esta propuesta que mezcla exitosamente arte, reciclaje y mensajes de protección al medio ambiente, como parte de su razón de ser.
Pero en esta iniciativa Remarek no estuvo sola.
El movimiento Hip Hop Kennedy cayó en cuenta del tremendo potencial que hay en el universo del aprovechamiento y le propuso a la vocera de esta organización hacer una primera convocatoria para convertir las "zorras" en lienzos y lograr a través de la pintura un gesto de transformación en el largo camino a la dignificación del reciclador de oficio en Bogotá.
Ana Rodríguez, mujer recia y protectora, líder de esta asociación no lo dudó. Se trataba no solo de "engallar" las carrozas sino de reparar las que estuvieran averiadas, de generar pertenencia, identidad y de liberar de una manera más sublime, que es lo que hace el arte al fin y al cabo, los sentimientos más profundos sobre la vida, la humanidad, el bien y el mal y el amor por la naturaleza.
"Hay varios compañeros y muchos muchachos adolescentes que les encante esa música, entonces ¿qué hicieron ellos?, para apoyarlo y para que cada socio se reflejara que cree lo que es, se les pintó su zorro, se les organizó, aparte de eso no solo fue la pintada sino la adecuación que estén bien y que estén limpios, que estén organizados y que sepan por donde va Remarek", afianzó la cabeza de Remarek.
A principios de noviembre de 2018 nació la propuesta "Enchúlame la carroza" y de varias reuniones y una gran voluntad de trabajar en favor de la población recicladora de Kennedy resultó, el 25 del mismo mes, una de las más enorgullecedoras actividades en campo, producto de esta solidaridad entre recicladores, artistas urbanos y exponentes del Hip Hop de esta localidad.
Nombres como Gotm, Manuel Malaver, Razureitor, Azul Luna y Tes, saltaron a la vista y junto a Ana Rodríguez se convirtieron en voceros de este movimiento que consiguió llamar la atención de muchos recicladores de oficio y, más que eso, lograr que prestaran lo más preciado de su trabajo, además de sus manos, o sea, sus carrozas, para plasmar en ellas con laca o pinceles las metáforas de las batallas ganadas a la desesperanza, a las drogas, a las dificultades familiares y a todo eso que ha significado trabajar duro y ganarse el sustento en las calles de la capital.
Johan Cofles , conocido como “Gotm”, Artista urbano
" El MHHK, Movimiento Hip Hop Kennedy, viene desarrollando proyectos con nuestra filosofía donde entendemos que el arte sí transforma, nos aliamos a Remarek, donde vimos que ellos cumplen la labor más importante ecológica a nivel digamos global. Si nos existieran estos trabajadores recogiendo lo que nosotros llamamos “basura” pues sencillamente ya estaríamos colapsados".
Hoy los recicladores de las carrozas pintadas de Remarek van y vienen por la calles de Kennedy y el resto de Bogotá, sin que alguien las ignore. Todos tienen que ver con ellas. Se toman fotos, las señalan, las distinguen de las demás y la gente percibe con claridad el mensaje que sus autores quisieron enviarles cuando las imaginaron ya terminadas, coloridas, impactantes, de la mano de los artistas que dejaron sus firmas y parte de su corazón en estos carros de madera y metal tras conocer las historias que los inspiraron.
Manuel Malaver, artista y parte activa de "Enchúlame la carroza":
"Otro señor reciclador tiene un hijo que está en la cárcel y me pidió el favor de que hicieramos un retrato de él, en homenaje a su familia que no la tiene en este momento".
Johan Cofles, comparte una vez más, su testimonio sobre las fuentes de motivaación de esta obra:
"Una carroza la desarrollé junto al dueño, él me empezaba a narrar la transformación que tuvo a través del reciclaje. Él venía de un tema de conflicto familiar donde estaba consumiendo droga y todo este contexto lo empezó pues a recapacitar por medio de su hija y teniendo este contexto lo que quice representar fue la lucha que él tiene cada vez que sale a trabajar entre el bien y el mal." Entonces encontramos al lobo que nos representa en este caso su pasado y el ahora representado en el tigre".
Y aunque muchos de los motivos tuvieron que ver con asuntos netamente personales, de alguna manera casi todos también tuvieron algo en común: elementos de la naturaleza para recrear esos instantes y recuerdos que fueron representados con fauna, flora o colores alusivos a la biodiversidad y a la necesidad de protegela, tan transversal a la esencia del reciclaje.
Por eso, la misma bodega donde se recicla, se separa y aprovecha el material que cada día llevan allá sus afiliados, como los considera su representante, no podía quedarse atrás.
Pájaros nativos, pobladores de la quebrada La Vaca que colinda con Remarek, también fueron homenajeados con el mural que le sirve de fachada. Una manera más de rendir respeto por los recursos naturales que ayudan a preservar y que, según lo expresa Ana Rodríguez y el Movimiento Hip Hop Kennedy, serán otra vez musa de una próxima convocatoria para seguir consolidando la campaña "Enchúlame la carroza".