Te has preguntado ¿qué pasa con los residuos que producen clínicas, hospitales, centros de estética, veterinarias, peluquerías, barberías entre otros que son denominados de riesgo biológico? Aquí te contamos.
Los residuos de riesgo biológico son todos aquellos que están clasificados en anatomopatológicos, cortopunzantes y biosanitarios. La UAESP a través del operador Ecocapital recoge los desechos de más de 22.000 usuarios en Bogotá, divididos en grandes, medianos y microproductores de residuos de riesgos biológico.
“Los residuos biológicos son todos aquellos como gasas, pañales, papel higiénico que llegan de los hospitales y cortopunzantes pues son los elementos que se usaron en cirugía, agujas y todo lo que tiene como acero y de origen animal, entonces todo lo que recogemos de las veterinarias”, explica Alejandro Valderrama, coordinador de tratamiento Ecocapital.
Una vez los carros recolectores realizan los recorridos, el material llega a una planta de tratamiento donde se realiza un proceso de alta ingeniería.
En cápsulas denominadas autoclaves se encargan de esterilizar o desnaturalizar los desechos, es decir, pasan de ser peligrosos a ordinarios para luego ser dispuestos en el relleno sanitario Doña Juana.
“Los residuos son sometidos a altas temperaturas mediante vapor húmedo generado por calderas, el vapor ingresa a una temperatura aproximada entre 150 y 160 grados celsius y una presión aproximada entre 50 y 60 psi”, explica Andrés Madera, director de operaciones de Ecocapital.
Por su parte los residuos anatomopatológicos tienen un tratamiento especial: llegan a la planta y se congelan en un cuarto especializado para luego ser llevados a una planta de incineración ubicada en Mosquera, Cundinamarca.
En total Bogotá genera aproximadamente 1.200 toneladas mensuales de residuos de riesgo biológico que reciben este tratamiento.