Los residuos orgánicos crudos se generan en las cocinas de los restaurantes y los comercios de frutas y verduras en una de las grandes superficies del sector de Mirandela en Suba, en este punto inicia la cadena virtuosa de separación que los convierte en material aprovechable. El modelo de separación en la fuente, disposición y aprovechamiento es implementado por la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos -UAESP- y Área Limpia, operador de aseo en esa localidad. 

“Mi trabajo es separar las bolsas verdes, con las negras y los cartones y las blancas, las verdes separar lo orgánico, a veces vienen con un poquito de plástico, sacarlo y dejarla solamente orgánico para el día viernes que es cuando pasa el camión a recoger el orgánico”, explicó Giancarlo Montilla, encargado de Mantenimiento en el centro comercial Mirandela Plaza. 

La separación, más que una tarea diaria, se convirtió en una convicción para quienes participan del piloto implementado por la UAESP y Área Limpia para la recolección de residuos orgánicos. “El consejo es que hagamos conciencia, está en cada uno de nosotros aportar, esto ya no es que venga alguien y nos obliga, no, hay que hacer conciencia de lo que queremos para nosotros y para el futuro del planeta, nuestros nietos y yo creo que allí nace todo”, señaló Leandro Ocampo, jefe de Cocina del restaurante Parrilla Beef. 

La recomendación es sencilla, separar en la fuente, disponer adecuadamente y aprovechar, tres pasos que reafirman por qué la basura no es basura. “Bueno entonces, lo verde, lo de los vegetales lo echamos en la bolsa verde, sí, y los residuos que ya no son aprovechables lo echamos en la bolsa negra, eso específicamente es lo que hacemos”. Expresó Jorge Mario Caldas Rocha, propietario de Carnes Finas Mirandela. 

La UAESP seguirá haciendo pedagogía con grandes superficies y comercios de frutas y verduras en algunos puntos de Suba, los buenos resultados que desde ya arroja la estrategia, permitirán extender la iniciativa a otras zonas de la ciudad.