Como es costumbre en Bogotá, todos los días llegan decenas de personas de diferentes lugares del territorio nacional buscando una oportunidad para salir adelante, encontrar un trabajo que se acomode a sus necesidades y en muchas ocasiones, un lugar en dónde conseguir un título académico. Este es el caso de Martha Gómez, una santandereana que desde hace 8 años encontró en la capital un lugar para cumplir sus sueños y los de su familia. 

Luego de probar varios oficios, encontró en la empresa Aguas de Bogotá, la oportunidad de trabajar por el bien del medio ambiente y por mejorar la calidad de vida de todos los que aquí vivimos. Ella es operaria de barrido y actualmente ejerce esta labor en Área Limpia, barriendo todos los días las calles del barrio Bilbao en la localidad de Suba. 

Tiene 2 hijas que son su motor, ellas viven en un pueblo llamado San Miguel en la provincia García Rovira y desde Bogotá Martha ve por ellas y por su madre quien la apoya en cada uno de sus pasos. Pronto su hija mayor cumplirá 15 años, un momento importantísimo que como dice Martha, requiere de una gran celebración que a punta de trabajo se hará realidad.

Esta mujer trabajadora pasa los días con su esposo, un abogado que conoció en el terminal de transportes de Bogotá y con quien durante varios años ha convivido y luchado de la mano. Él y su amor por el medio ambiente se convirtieron en la principal motivación para que empezara un tecnólogo en Gestión Ambiental en el Politécnico Internacional. Se graduó hace algunos meses, en la base de operaciones de Aguas de Bogotá hizo sus prácticas ambientales y fue precisamente esta experiencia la que la convenció de seguir estudiando para poder convertirse muy pronto en una profesional en ingeniería ambiental. Martha ama su trabajo y es muestra de que los sueños se cumplen con esmero y mucha dedicación.