60 niños y niñas de noveno grado del Colegio Dios es amor de Ciudad Bolívar visitaron la Planta de Tratamiento de Residuos Orgánicos de Mochuelo Bajo, para aprender sobre el aprovechamiento de estos compuestos. En el recorrido conocieron los procesos de compostaje tradicional y lombricultura.
Estudiantes del Colegio Dios es Amor de Lucero Alto, ubicado en Ciudad Bolívar, visitaron la Planta de Tratamiento de Residuos Orgánicos de Mochuelo Bajo, administrada por la Asociación de Recicladores Sineambore.
“Nosotros venimos como parte de una salida pedagógica para aprender el aprovechamiento de la parte de las diferentes basuras, o que nosotros solemos llamar “basuras”, pero realmente no lo son. También, el hecho de entender cómo es todo el procedimiento que se realiza para los diferentes elementos y también entender las diferentes partes de los suelos que podemos ver en nuestro día a día”, aseguró Wendy Carrión, estudiante del grado noveno A.
Este recorrido estuvo acompañado por recicladores de oficio de la Asociación Sineambore, quienes explicaron cómo se hace el aprovechamiento de residuos orgánicos. “Estuvimos recibiéndolos, contándoles que esto es un proceso piloto, que es la primera planta activada por recicladoras y recicladores de oficio y explicándoles así, en viva experiencia, qué se hace en el tratamiento de los residuos orgánicos, tanto en el área de compostaje tradicional como en el área de lombricultura”, señaló Sonia Osorio, líder de esta asociación.
Los niños también aprendieron sobre Los Mochuelos, zona rural de Ciudad Bolívar, y los impactos que genera para la comunidad de estas veredas la existencia de un relleno sanitario en el Predio Doña Juana.
De acuerdo con Brayan García, él y sus compañeros aprendieron cómo es la organización y el método para recolectar los residuos orgánicos. A lo que añadió Jayder Velasco “pienso hacer algo con mi familia: compartir el conocimiento, pues para tratar de sembrar o hacer algo con nuestros residuos”.
Esta actividad también contó con el acompañamiento de gestores sociales de la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos -UAESP. “Es un recorrido muy ameno, pedagógico, sencillo, muy didáctico, muy lleno de información que intenta entonces ese proceso de concientización, esa sensibilización que necesitamos desde los más jóvenes, en los procesos de selección en la fuente, la separación que se debe hacer en los hogares de los orgánicos, lo inorgánico, lo aprovechable”, concluyó Óscar Fuentes, profesional de la subdirección de Disposición Final.