Esta actividad, que estuvo liderada por la Secretaría de Planeación, contó con la participación de la comunidad que vive alrededor de Doña Juana. En estas mesas de participación ciudadana se ayudaron a resolver inquietudes y a proponer soluciones a diferentes temas que afectan a las personas que viven en esta zona rural al sur de Bogotá.
El fin de las Unidades de Planeamiento Local (UPL) es asegurar que las comunidades tengan acceso a los servicios del Distrito, en pocas palabras: aproximar la ciudad a las personas. Esto se puede lograr mejorando los ejercicios de planeación con los líderes y lideresas de esta zona rural de Bogotá, creando proyectos de proximidad.
De esta forma, la UAESP acompañó a la comunidad en estos talleres de co-creación que lideró la Secretaría de Planeación. ‘‘La comunidad participa aportando acerca de la visión que tiene de su territorio, de cómo debe ordenarse y por supuesto allí la UAESP juega un papel importante, toda vez que somos un actor relevante con una presencia significativa en este territorio’’, aseguró Hernán Tocarema, funcionario de la UAESP.
Teniendo en cuenta el objetivo de las UPL, en este caso el de la cuenca del Río Tunjuelo, las diferentes personas de la comunidad llegaron a Mochuelo Alto para participar en este taller, dejando sus observaciones, inquietudes y preocupaciones frente a las problemáticas que existen en esta zona rural de Bogotá.
‘‘Lo que se plantea en este espacio, por parte de los diferentes miembros asistentes y participantes de este espacio desde lo rural, es buscar la manera de cómo las instituciones, cómo las diferentes entidades del Distrito entran a solventar esas necesidades históricas que tiene la ruralidad como tal y cómo esto se construye y se articula dentro de la figura de la UPL del Río Tunjuelo’’, señaló Néstor Montaña, habitante de Mochuelo.
La participación de la UAESP en este espacio fue esencial para resolver y estar al tanto de las inquietudes de la comunidad en torno a diferentes temas relacionados con Doña Juana; como lo que concierne al manejo de las zonas de protección de las quebradas que abastecen a las comunidades con sus acueductos veredales, de las barreras ambientales o el cumplimiento de la licencia ambiental.
Finalmente se llegaron a diferentes conclusiones durante la jornada y de esta manera trabajar en beneficio de las personas que pertenecen a este territorio. ‘‘Particularmente en el caso de aquí de Mochuelo donde estamos, pues las comunidades creo que todavía tienen muchas dudas sobre qué implica realmente, cómo les va a mejorar la vida esto, porque son comunidades que siempre se han sentido, de alguna manera, afectadas directamente por el entonces relleno sanitario, entonces esas dudas persisten y yo creo que son unas de las primeras que hay que atender, o sea la recomendación que uno diría es que lo que se va a trabajar siempre se tiene que trabajar primero en perspectiva de solucionar lo inmediato que es cómo esto aporta a mejorar la calidad de vida de las personas que están cerca’’, indicó Diana Victoria Carvajal, subdirectora de la Secretaría de Planeación.