Justo cuando los locales comerciales abrieron sus puertas, antes de atender las demandas de los clientes, una docena de gestores de la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos ya se había desplegado por los 3 pisos para entregarles un mensaje de vital importancia:
"Hoy venimos en el centro comercial haciendo una campaña sobre separación en la fuente. La idea es que hoy sepamos o recordemos cómo debemos empezar a utilizar las dos bolsas, es reciclar en 4 pasos".

Laura González, gestora lider de esa actividad, recorrió inicialmente la plaza de comidas, el sector del complejo comercial que más genera residuos y con estas palabras completó la tarea que les fue encomendada a ella y a sus compañeros:

"Utilizamos dos bolsas, una blanca y una negra, vamos a empezar a separar en la blanca lo que es aprovechable, papel, cartón, plástico, vidrio, aluminio y Tetrapack, y en la bolsa negra lo que definitivamente no es aprovechable y debe irse al relleno sanitarioLaura González, gestora de Aprovechamiento, ambiente sobre charla, bolsa blanca y bolsa negra".

La estrategia se multiplicó por 300 establecimientos, cuyos administradores reconocieron el valor de la separación desde la fuente para unirse a la gran cruzada que la Alcaldía de Bogotá adelanta con tal de lograr un cambio cultural en el manejo de los materiales reciclables, independientemente del sistema de manejo de residuos que haya implementado el mismo centro comercial.

Lo dejó claro, Jeison Enciso, el ingeniero ambiental de Plaza de las Américas, que por cierto, ya ha recibido varios reconocimientos en virtud de la eficiente gestión de las hasta 100 toneladas de residuos que genera el complejo cada mes.

"Nosotros trabajamos con los locales a partir de capacitaciones, donde los sensibilizamos y les damos a entender o a conocer cuáles son los residuos reciclables y cuáles no. Digamos que por la cantidad que generan, y por el alcance de cada local, sabemos que son de pronto algunos locales pequeños, no le solicitamos que hagan la clasificación de residuos por papel, plástico, cartón, sino simplemente que separen lo reciclable y lo no reciclable".

El ingeniero ambiental aseguró que la estrategia de usar bolsa blanca y bolsa negra sí es muy útil para que la adopten los comerciantes de locales que necesiten separar lo reciclable en una misma bolsa con tal de que no haya pérdida de esfuerzo al botar un único residuo y, al contrario de lo que se quiere, generar más desperdicio.
Sonia Gómez, administradora de local de una conocida marca de accesorios en cuero, reafirmó esta idea:

"Claro, así dividimos mejor y tenemos nosotros más conciencia también de aprovechamiento de los residuos".

Enciso reveló que Plaza de Las Américas aprovecha el 50 % de sus residuos al separar y entregar a sus aliados estratégicos, entre los que se encuentran organizaciones de recicladores de oficio, un 25% de material aprovechable y el otro 25% de residuos orgánicos para facilitar procesos de reparación ecológica como la fabricación de compós.
Con las horas, la jornada adquirió una mayor dimensión cuando se le "puso ritmo" a la sensibilización.

En la plazoleta principal un grupo de funcionarios y recicladores de oficio, vinculados a la Uaesp, aparecieron para bailar el contagioso jingle que identifica la estrategia "Reciclar Transforma".

La presentación, alimentada con otras actividades del operador de aseo Ciudad Limpia,  atrajo a gran cantidad de visitantes, algunos de los cuales saltaron a la tarima para poner en práctica los pasos y las estrofas de "Ponle ritmo a reciclar".

Al tiempo, unos 200 espectadores recibieron bolsas negras y blancas para llevar a sus hogares la importante reflexión de clasificar, lavar y secar el plástico, el Tetrapack, el vidrio, papel, aluminio y el cartón y luego ser entregado al reciclador de oficio de su sector.

 En total, unas 1.500 personas entre clientes, transeúntes y comerciantes fueron impactadas con la intensa jornada que se prolongó por cerca de 6 horas en uno de los centros comerciales de gran afluencia en la localidad de Kennedy.