Voluntarios de la Fundación Nutresa, funcionarios del operador de aseo Lime y gestores de la Uaesp le cambiaron la cara, en menos de 5 horas, a uno de los escenarios más compartidos por la comunidad del barrio Veraguas en el oriente de Bogotá.
Voluntarios de la Fundación Nutresa, funcionarios del operador de aseo Lime y gestores de la Uaesp le cambiaron la cara, en menos de 5 horas, a uno de los escenarios más compartidos por la comunidad del barrio Veraguas en el oriente de Bogotá.
Con la temprana llegada de un grueso de hombres y mujeres dotados de cubetas, rodillos de pintura, espátulas, escobas y bolsas, tanto blancas como negras, el parque Veraguas lucía distinto: Lleno de gente, aprovechado al máximo en su razón de ser y protegido por un segmento de la ciudadanía que demostró su preocupación por mantenerlo limpio.
Uniformados y alineados de modo similar a una tropa desde las 9 de la mañana se replegaron por todo el parque para cumplir tareas distintas. Unos recogían desperdicios del pasto y el pavimento, otros removían afiches de los postes, unos preparaban pintura y otros iniciaban sus recorridos por el barrio para llevar a comerciantes y habitantes el mensaje de la estrategia “Reciclar Transforma”.
Voluntarios de la Fundación Nutresa, trabajadores del operador de aseo Lime y gestores sociales de la Uaesp integraron este gran equipo de trabajo con un único fin: embellecer uno de los puntos de mayor integración entre los vecinos de este sector.
“Nuestras acciones de voluntariado están muy comprometidas con el desarrollo de nuestra gente, brindarles un espacio de conocimiento, de formación y de cómo también nuestra gente, que es nuestro principal activo, pueda conectarse con acciones solidarias y con acciones que sensibilicen a una comunidad pero que también en ellos quede una capacidad instalada”, Ángela Viscaya, parte del equipo de la Fundación Nutresa.
El parque Veraguas fue escogido como foco de esta jornada, adicional a su importancia en el barrio, por la ubicación cercana de las compañías de la firma Nutresa en la localidad de Puente Aranda, según Ángela Viscaya.
Durante no menos de cinco horas, al menos 40 kilos de residuos fueron recolectados por estos voluntarios a los que se les unieron operadores de la empresa de aseo Lime, recicladores de oficio
de la zona y gestores de aprovechamiento de la Uaesp, validando con esto la gran atención que la Alcaldía de Bogotá sigue depositando en el estado de los parques de la capital.
Al menos 150 personas, entre habitantes y comerciantes del barrio, fueron impactadas con el mensaje de separación desde la fuente y el ejercicio de reciclar en cuatro pasos con el empleo de la bolsa negra para depositar los residuos aprovechables y la bolsa blanca para los residuos ordinarios.