El poeta bogotano es la primera persona inhumada en el Cementerio Central que muere por mano propia.
José Asunción Silva, poeta bogotano que a sus 31 años se quitó la vida con un tiro en el pecho, es la primera persona inhumada en el Cementerio Central que muere por mano propia. Este ilustre del país, justo un día antes morir, se aseguró del lugar exacto de su corazón en una revisión médica. Su cuerpo duró 40 años lejos de tocar un cementerio católico, pero ya en 1937 tuvo finalmente su reposo en la elipse del Cementerio Central donde fue enterrado junto a su adorada hermana Elvira, quien fue su principal confidente y le inspiró poemas como Nocturno.
Silva dejó un legado poético invaluable para el país, escribió el Madrigal, Mariposas, Suspiro y otros tantos poemas. Es protagonista del billete de 5 mil, por un lado, esta su rostro y al respaldo se leen algunas líneas del poema Nocturno. Desde su juventud se le consideró una mente brillante, compartía tertulias literarias con su padre y de joven pasó una temporada en Europa influenciando considerablemente sus últimos poemas.
Sobrellevó durante años la bancarrota que le dejó su padre luego de morir y casi derrotado acabo con su vida en 1896 dejando dos libros maravillosos, De sobremesa y Libro de versos.