La administración del alcalde Enrique Peñalosa trabaja para garantizar la disposición final de los residuos en Bogotá a partir de la aplicación de nuevas alternativas diferentes a la disposición de residuos en un relleno sanitario.
La primera alternativa que presenta la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos es la incineración de residuos con generación de energía, este proceso consiste en quemar la totalidad de las basuras que llegan al relleno sanitario.
La quema de los desechos a altas temperaturas puede reducir su volumen en hasta un 95% y su peso hasta un 80%. Los gases producto de la combustión serán utilizados para la generación de energía limpia y sustentable.
El siguiente escenario que plantea el estudio financiado por la UAESP y realizado por la Corporación Financiera Internacional para analizar otras tecnologías diferentes a las del relleno sanitario y que podrían ser adoptadas en Bogotá, es la separación mecanizada con digestión anaerobia e incineración para generación de energía. Este proceso consiste en la recuperación de los residuos que no son recolectados por los recicladores y que tienen potencial de venta en el mercado (papel, metal, cartón, textiles, vidrio, chatarra, pet, Tetrapak) allí, son separados a través de un proceso mecanizado. Adicionalmente los residuos orgánicos son también separados para para ser procesados por en digestores anaeróbicos para generar energía eléctrica por el biogás que producen.
Por último, el estudio plantea la separación mecanizada con generación de combustible derivado de residuos y tratamiento de residuos orgánicos que consiste en la recuperación de los materiales con mayor poder calorífico (cuero, madera, textiles, goma, papel, plástico y cartón) para la producción de combustible; de la misma manera plantea la separación de los residuos orgánicos para producción de compostaje que no es más que la utilización de la materia ordinaria procedente de residuos agrícolas y de jardinería tratados para acelerar su descomposición y ser usados como fertilizantes.
Para la implementación de cualquiera de las anteriores alternativas se necesitará la construcción de plantas de tratamiento y modificación tarifaria.
Los análisis se hicieron a partir de la información de los residuos dispuestos en el relleno sanitario Doña Juana desde el año 2012 y se adoptó como año base el 2022.
La Alcaldía de Bogotá, además, mantiene diálogos permanentes con el Gobierno Nacional para viabilizar estas alternativas a partir de la modificación de la normativa que reconozca tarifariamente nuevas tecnologías para tratar los residuos. En este proceso será fundamental la participación de la ciudadanía para la disposición de sus residuos utilizando la bolsa blanca para el material aprovechable y la bolsa negra para el material ordinario.